LOS
JOVENES TOMAN LA PALABRA
ENCUENTRO AÑO
2000
En los carnavales pasados tuve la oportunidad de asistir a
un evento realmente distinto: el Encuentro Año 2000. Estos días
preparados por el equipo del Programa de Jóvenes de Cesap (Centro al
Servicio dc la Acción Popular) significaron un compartir de vivencias de grupos
juveniles de distinta índole, ya que entre los participantes se encontraban
miembros de grupos de ecología, Scouts, Movimientos por la Paz, Sociedad
Bolivariana, teatrales, músicos, cristianos y una gran cantidad de jóvenes con
distintas formas de pensar, pero un ideal común: Hacer realidad todos
nuestros sueños de juventud. Pero, como dice el lema de este encuentro
celebrado por cuarta vez, ¡Para ganar el futuro hay quesoñarlo primero!
Ya, desde el acto de instalación efectuado en el Ateneo
de Caracas, se sentía un calor humano muy especial, un ánimo que recordaba
aquella pregunta que nos hizo cl Papa en su visita: “Los jóvenes
venezolanos ¿se dejarán abatir por las dificultades, o tendrán el valor de
ser cristianos de verdad y de construir una sociedad más justa, más fraterna,
más acogedora y pacífica?”. Luego, los representantes de los trece
Estados del País presentes en el encuentro, nos dirigimos a Pozo de Rosas,
donde se desarrolló el resto de las actividades.
En las charlas sobre el joven hoy, pudimos escuchar a las
representantes de la Dirección de Atención al Joven del Ministerio de Familia,
quienes nos expusieron sus planes referentes a las diversas áreas que cubre esa
Dirección. No tardó en escucharse la pregunta que todos nos hacíamos en
nuestro interior ¿Por qué hemos de confiar en las promesas del gobierno si
tantas veces nos ha defraudado? Este es un llamado a la reflexión para quienes
están en el poder; estamos seguros de que si quieren, lograrán cambiarnos esa
imagen. También escuchamos a las representantes de AVESA (Asociación
Venezolana para una Educación Sexual Alternativa) y ASOCLIVA (Asociación
Venezolana de Clínicas Jurídicas), mostrándonos la problemática actual del joven en esas áreas
y lo que están haciendo por esta realidad.
Tuvimos un momento para unir nuestras esperanzas y sin
distinción de credo u otra clase, elevamos una plegaria por la paz. Realmente
los jóvenes queremos paz para el mundo.
Luego de realizar simultáneamente una serie de talleres,
diez en total, entre los que se encontraban los de ecología, derecho ciudadano,
cine club, sexología, la mujer joven, in-digenismo y cristianismo, se llegaron
a acuerdos concretos, como los encuentros regionales y el Día Nacional de los
Grupos Juveniles, el cual se celebrará el 6 de octubre de este año.
Quisiera decir junto a Asdrúbal Olivares, coordinador del
Programa de Jóvenes de Cesap: “Queremos para el futuro una relación más
transparente con el mundo:
Ø
Un
diálogo con los adultos, con los niños, con nosotros los jóvenes, con los
ancianos.
Ø
Un
diálogo que supere las barreras entre menores y mayores.
Ø
Un
diálogo que haga posible y más fácil el transito de una etapa de la vida a
otra, en el cual la juventud gane una positiva experiencia al futuro, a nuevos
momentos, a plenitud.
Ø
Un
diálogo con el que podamos expresarnos sin temor al regaño de la familia, en
la escuela, en la comunidad.
Ø
Una conversación portavoz de los sentimientos,
inquietudes, exigencias y propuestas de los jóvenes donde nos sintamos acompañados
y valorados como personas”.
Por esta juventud que se prepara y trabaja desde ahora para hacer de los años 2000 una búsqueda de paz y justicia, me animo a apostarles un gran éxito. Si tú también tienes estos u otros sueños. puedes compartirlos con otros jóvenes en cualquiera de los grupos existentes en la Parroquia; no importa que parezcan loqueras, porque estamos dispuestos a escucharte y ayudarte a desarrollar tus ideas. ¡Anímate!
Néstor Briceño Lugo
16 de febrero de 1991
Publicado en “Iglesia y Vida”, marzo de 1991, 14.