SALVATORIANOS HOY
¿QUIENES SON
LOS
SALVATORIANOS?
A finales
del siglo pasado, existió un hombre con un gran sueño: que todos los hombres
conocieran a Jesús y lucharan por promover el Reino de Dios. Francisco Jordán,
así se llamaba este joven sacerdote alemán, sostenía que el laico (o sea todo
aquel que no es sacerdote) debía ser el principal promotor de este anuncio de
salvación, y así se escribe en los primeros folletos de promoción de este
revolucionario movimiento: “El apostolado laico es lo más importante en
nuestros días”.
Francisco
Jordán no quería una “fábrica de curas o religiosos”: cada uno
desde su estado de vida, desde su familia, desde su carisma y vocación -según
él-, debía ser un salvatoriano. Para el momento en el cual se formó este
movimiento, era algo inconcebible un trabajo en conjunto entre sacerdotes y
laicos, pero años más tarde, en 1962, el Concilio Vaticano II
corresponsabilizará al laico y al sacerdote de la proyección de la Iglesia en
el mundo.
El movimiento del joven Jordán,
llamado la “Sociedad Apostólica Instructiva” y que reunía a todo tipo de
personas, desde grandes intelectuales hasta amas de casa, recogía las ideas
centrales y la finalidad de este gran sueño:
l Dar a
conocer al Salvador.
l Instruir,
enseñar, propagar, educar, promover...
l Con
todos los medios que la caridad de Cristo inspira (discerniendo en cada tiempo y
en cada lugar los más adecuados).
l Universalidad
de lugares, especialmente en los más necesitados.
l Hacerlo
al modo de los apóstoles, al modo de Jesús, que fueran realmente líderes y
animadores para los demás.
l En
unión y colaboración con la Iglesia universal y particular.
Finalmente, en el año 1883,
este movimiento se convierte en una congregación religiosa, la “Sociedad del
Divino Salvador” o Salvatorianos.
Hoy
en día, existen los sacerdotes, las hermanas y los hermanos salvatorianos;
asimismo, desde 1970[1]
y en diversos países, funcionan movimientos de laicos asociados a los
salvatorianos, haciendo realidad el sueño del Padre Jordán.
En
Venezuela contamos con la presencia de los padres Salvatorianos en la Parroquia
“Los Santos Angeles Custodios de Catia" –donde llegaron en 1957–, en
la Parroquia “San Luis Gonzaga” (Chuao) –desde
1962– y, a partir de 1983, la misión parroquial en el Barrio Vista al
Sol, Ciudad Guayana.
El
Salvatoriano es un hombre que da la cara por Cristo en el medio en el que vive,
con conciencia comunitaria y universal, predicando la Buena Noticia de Jesús
con el ejemplo y todos los medios que la
caridad de Cristo le inspiran.
“Nuestro
tiempo tiene necesidad de apóstoles
del
mundo. El sacerdote no basta. Necesitamos
cristianos
activos, quienes desde el gran púlpito
del
mundo prediquen y defiendan el Evangelio
con
su palabra, con su vida y con su manera
de
actuar”.
(Pensamiento
del P. Jordán)
Néstor
Briceño
16
de enero de 1991
Publicado
en “Iglesia y Vida”, febrero de 1991, .
[1] En el original publicado existe un error: dice 1981, en realidad es en el año de 1970 cuando comienzan los laicos asociados en Estados Unidos.